POR QUE DIABLOS DIAVOLA?
"Quizá un poco por ser irreverentes y otro poco por el simple hecho de poder hacerlo"
porque tenemos el valor, que pocos tendrán, de cargar ese nombre con un estandarte y atrevernos a reivindicarlo.
La connotación que se le ha dado al diablo ha sido la personificación del mal tal como se concibe en diversas culturas y tradiciones religiosas.
Se ve como la objetivación de una fuerza hostil y destructiva, pero ¿qué si te dijéramos que el diablo no es malo, y mucho menos bueno, simplemente es y existe al igual que el sexo?
Veamos al diablo como parte de una dualidad presente en el ser humano, imaginemos la típica imagen de un personaje en alguna película o serie en el momento en que se enfrenta a una bifurcación en su camino de toma de decisiones, normalmente una situación en la que se ponen a prueba sus valores morales representados por la encarnación de un pequeño ángel a un costado y del otro lado su contraparte ,el diablo, que le incita a irse por el camino que lleva al placer y a la lujuria, nociones fuertemente castigadas en la religión.
Si lo vemos desde la perspectiva teologica al principio de los tiempos, el diablo siempre ha estado ahí para tentar al ser humano; desde Eva y la manzana hasta al mismo Jesús.
¿Y a qué nos incita el diablo? a sucumbir ante la lujuria y la pasión. Estas pulsiones presentes en el ser humano han sido catalogadas como perversas, y al igual que el sexo siguen siendo un tema tabú, sin embargo en diavola decidimos verlas como lo que son, parte esencial de la vida y es que ¿te has detenido a pensar en todos lo ámbitos en que la energía sexual se ve inmiscuida en la vida diaria? el deseo sexual es el más poderoso de los deseos humanos, imagina el poder que tienes en tus manos al buscar la transmutación de la energía sexual, la propia naturaleza de esta nos mueve. SOLO ES NECESARIO ENFOCAR ESE PODER.
“Dejen de lado sus inútiles tabúes y sus restricciones sobre la energía sexual. Mejor ayuden a otros a comprender su maravilla y canalizarla adecuadamente” (Walsch, 1995)
Esta frase nos motivo a darle dirección y sentido a nuestro cometido por ello el logo de la marca es una diablita que con su silueta expresa una imagen de seguridad, atrevimiento, energía, vida, sensualidad y toda aquella emoción ardiente que surge desde dentro de nuestros corazones. La diavola puede cambiar de posición dándonos la versatilidad de conocer distintas facetas del ser humano y de nosotros mismos como individuos, nos desata de lo que creíamos saber y que ahora está cambiando.
En Diavola buscamos aprender y compartir el conocimiento, ampliando nuestra visión y abriéndonos a nuevas posibilidades.
Buscamos más, busca(te) y encuentra(te) a nuestro lado.